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sábado, 8 de noviembre de 2014

Un nuevo cuadro, 3ª parte. El Señor del Silencio

Hola a todos y a todas. 
Hace tiempo que no publicaba algo sobre la evolución de este nuevo cuadro, que lento pero seguro que lo termino, ya le queda menos. Así fue como lo dejé la última vez 
Y a partí de ahí he adelantado mucho.
Como podéis ir comprobando a lo largo de este post.
Las pinceladas son ahora algo toscas pero pero se trata de manchar e ir sacando las distintas tonalidades al cuadro
Y sigo manchando y dándole sombra para sacarle ese volumen a la imagen para ir dando la sensación del relieve de la escultura.
Y como siempre en mi improvisado taller de mi cuarto. Algo más cómodo, porque ahora ya hace menos calor.
Y sigo adelante ahora ya estoy encajando las potencias para ir viendo a la vez el efecto que me hace en el conjunto de la pintura.
Algunas fotografía no se ven bien debido al reflejo de la luz sobre el óleo fresco como pasa en esta.
Ya estas horas tengo que encender una lámpara a modo de flexo para poder seguir trabajando en el cuadro. -Como se notan que ya los días son más cortos, y con eso del cambio de la hora es horrible, la tristeza que supone y la melancolía del atardecer de los que se avecina como es el invierno.
Y sigo pintando las potencias y como veis, de momento he marcado más o menos por donde se supone que va el cordón de la túnica a modo de que me sirva de orientación. La luz ya es muy mala y el foco del flexo y después de mucho fijar la vista cansa y duelen las cuencas de los ojos. Hay que parar dejarlo y dedicarte a otra parte del cuadro que no suponga tanta tensión con la vista.
Y e aquí el resultado después de dos día de trabajo, que son mis día de descanso, pero merece la pena ver los resultados de tanta tensión y dolor de espalda de las horas que uno se lleva sentado en la misma posición con los brazos alzados, uno con la paleta de los colores y el otro con el pincel.
Y como dije antes había que cambiar y dedicarte a otra parte del cuadro que te sacara de la misma posición y relajarte de la tensión. Y yo pues ya de remate he dibujado con carboncillo los trazos de la cruz y de la mano para luego más tarde que me sirva como guía, mas o menos, a la hora que volver a coger los pinceles.
Hasta otro día. Y espero que no os haya aburrido y hayáis pasado un rato agradable conmigo aquí, en mi improvisado taller de mi cuarto. 
Un saludos a todos y a todas.
Manuel Sánchez de los Reyes

jueves, 18 de septiembre de 2014

Un nuevo cuadro 2ª. parte


El Día 2 de mayo creo recordar publique el principio de una nueva obra que tenía en mente, la cual se trataba de pintar al Señor de la Hermandad del Silencio.
Bueno pues después de barias vicisitudes y tal y tal. Me puse manos a la obra de nuevo y el pasado día 2 de septiembre, al levantarme y ver el proyecto o más bien el boceto del cuadro tal como lo dejé, me entró esa vena de inspiración.
Y me puse a preparar todos los pinceles y la paleta junto con los colores al óleo, que según recuerdo haberlo ya comentado otras veces, es lo que más coraje me dad....eso, el principio. 

El tener que preparar y componer los tonos, los colores, las mezclas de las distintas tonalidades etc. etc. Ah ! y preparar los disolventes y el aceite de linaza .
Por ejemplo como se pueden ver en las fotografías en mi improvisado taller de pintura con un calor horroroso, pero la mar de a gusto con mi viejo ventilador al lado.
Bueno dejemos de milongas y vayamos al grano: que es intentar sacarle el tono "madre" o el que nos sirva de base para ir sacando la tonalidad de la encarnadura del Rostro del Señor del Silencio.
Este es el rostro del Señor del Silencio con el que de momento quiero trabajar, como hice con el del Gran Poder, para empezar el cuadro y irle sacando los tonos, sombras, claros y oscuros del rostro y así empezar a encajar la imagen en el lienzo.
De momento voy manchando así al tiento, más o menos, para irme orientando y hacerme la idea del tono, color y , ¿ porqué no ?, ir tanteando la temperatura de los colores de la encarnadura.
Tengo que ir levantándome y despegarme del cuadro para ver desde lejos el efecto, osea , para ver mejor el conjunto de la cabeza.
Y seguir manchando y retocando. De momento todos estos trazos o pinceladas, no son definitivos. Pues hasta yo mismo me sorprendo por cada toque que le voy dando por el resultado que ocasiona en el lienzo.
He aquí los resultados, tal como os voy contando, que hasta yo mismo me sorprendo de los resultados .
Aquí ya me voy haciendo con el rostros, osea, con el parecido de los tonos principales del rostro del Señor.
Este es el resultado después de todo una mañana de trabajo, ¡ que la verdad !, estoy satisfecho.
Bueno: pues es hora de comer y de echar una buena siesta como que es mi día de descanso. Y el cuadro descansará aquí, junto al de Santa Marta, a mismísimo lado de mi cama. 
Z.Z.Z.Z.Z.Z.
¡ Hola ! ya he comido he descansado y he dormido como un niño chico y ahora pienso volverme a liar de nuevo con el Señor de la Hermandad del Silencio.

Un apunte que quiero destacar, que el hecho de descansar y despejarse un poco del trabajo, sobre todo de este de la pintura, y yo creo, que de cualquier otro trabajo que tenga que ver con el arte, como  por ejemplo con la música, con hacer maquetas, o cualquier otro tema que requiera cierta concentración y fijeza con la vista es fundamental. Para ver luego las cosas más claras y no embotarse de tal forma que llega un momento en el que uno no da con la nota o con la pincelada , en este caso, y basta para un descanso para que se vea todo más claro.

Comprueben ustedes mismos los resultado. "Esto va para arriba"
Estoy logrando mi objetivo, pero no confundirse que todo lo que está pintado es para irme orientando en la terminación, luego cambiará mucho el cuadro y los detalles del mismo
 Yo creo que ya por hoy está bien. He adelantado mucho el cuadro y ya es hora de cenar y de dormir. Mañana será otro día y esperaré otro día de descanso que no tenga que hacer ningún mandado, para dedicarme en exclusiva a mi nueva obra.
Ya es muy tarde hay que dormir. Espero que no os haya aburrido este mediocre relato de un servidor.
Hasta pronto. Estoy deseando verlo acabado con la túnica y sobre todo con su Cruz de carey
Un saludo amigos y amigas.
No dejar de rezar todas las noches, por lo menos tres Ave Marías.
¡¡ Que calor, yo pongo mi viejo ventilador !!. Buenas noches y feliz descanso.
Manuel Sánchez de los Reyes

Un nuevo cuadro. 1ª Parte

Hola: después que hace tiempo que no hago nada, bien por falta de tiempo o porque no le viene a uno esa vena de inspiración que te hace levantarte con ganas de dibujar y pintar. Hoy me ha saltado esa chispa en el " interior de mis entrañas" y  me he levantado decidido a comenzar una nueva obra.
Y he aquí el resultado.
Después de ver muchas y diferentes fotografías de triduos, quinarios, basa manos, besa pies, y yo no sé cuantas páginas y blog o post. Me he decidido pintar al Señor del Silencio de aquí de Sevilla.
En estos momentos lo que estoy haciendo es marcar o dibujar los principales rasgos de la imagen.
Al igual que hice con el Gran Poder. Son trazos ligeros para luego cuando tenga que usar la pintura al óleo, en este caso, como las anteriores obras, ya tenga una base en la cual directamente pueda meter la punta del pincel.
Además ayuda a encajar la imagen en el sitio preciso del lienzo par lograr encajarla y así después pintar la túnica y todos los elementos que conlleva la obra.
Bueno..Y esto son los resultados del principio de este cuadro. Aquí lo dejo con ganas de empezar con el óleo.
Los comienzos son siempre muy pesados, porque mientras uno está realizando el boceto de la obra se lo imagina uno como quedaría ya terminado, o de que forma, o que postura, o de que lado sería mejor. En fin eso es al menos para mí lo peor.
Espero que os haya gustado y no os haya aburrido mucho esta breve entrada de post.
Un saludo a todos y a todas, un amigo.
Manuel Sánchez de los Reyes

lunes, 23 de junio de 2014

Mis cuadros de hace mas de 30 años III

Hola mis queridos amigos y simpatizantes aquí estoy con una nueva entrada de la historia de mis cuadros, los que me quedan claro, -pues he pintado algunos que otros más pero no los tengo en mi poder.
Este cuadro de la Cigarrera con su antiguo misterio. Está empezado pero terminado, ya ven que si hace tiempo que empecé a pintarlo, que ha cambiado el misterio totalmente y así se ha quedado el lienzo. Pero seguro que ahora lo terminaré claro pero con el misterio antiguo, pues lo más trabajoso del cuadro ya está prácticamente hecho. He aquí el cuadro:


Este cuadro lo tengo guardado en mi cuarto Y hoy lo ha sacado pues al escribir este post lo he fotografiado y me da cierta melancolía y alguna que otra rabia por no haberlo terminado en su momento. Pero lo mejor de todo que eso tiene arreglo sólo con ponerse y empezarlo por donde lo dejé.

Otras de la obras que yo le tengo mucho cariño es este bello cuadro de la Virgen del Dulce Nombre pasando por las naves de la Catedral de Sevilla.


Esta es otra toma un poco más encajada en la moldura del mismo.


Y aquí es donde está colocado el cuadro.


Está a la derecha de la imagen al lado del cuadro del Señor de Pasión.
Este es otro nuevo cuadro que concebí tras una pequeña muy pequeña fotografía que me dieron al visitar la Iglesia del Museo, de esas pequeñas de bolsillo para la cartera que le dan a uno de recuerdo.


Pero yo lo pinté en grande al mismo tamaño que el de Pasión y el de La Virgen de la dulce Nombre, de echo está colgado justo en la pared de enfrente mirando la fotografía anterior. 
Este cuadro me costó mucho trabajo el poder sacarle las proporciones debido a lo retorcido de la imagen y sobre todo que el soporte que utilicé para fijarle era una fotografía muy pequeña. 
Eso pasa por la poca experiencia, pues ahora antes de acometer una obra me documento muy bien y selecciono barios modelos o soportes en donde buscar la inspiración para proyectar lo que quiero pintar.

Ahora damos un cambio en la historia ,osea en la historia de mis cuadros, y nos desplazamos a mi viejo taller. Vean esta fotografía que encontré. está llena de chismes y de un mueble viejo desalmado.


Esta parte está más aseada era donde tenía el banco y la mesa para hacer los trabajos si miráis al fondo a la derecha se ve mi moto Derby Diablo Super tapada con una manta para que no cogiera polvo....Je, je, je, en aquella época era todo un lujo tener una moto como esa. Aun la tengo guardada en la cochera de la casa del pueblo en donde tengo todos lo cuadros.
Y ahora prestar atención a esta otra parte del taller


Hay muchos chismes un mueble viejo desalmado que estaba en proceso de restauración...etc. Pero fijaros en la parte derecha de la imagen, -lo veis, sí, es un cuadro, un gran cuadro del Cachorro que estaba pintando y que mide 3 metros por 2,5 metros de ancho era  el Cachorro pintado a tamaño natural. Un lienzo que yo mismo compre con esas medida y le hice un bastidor para esa ocasión.

Bueno pues cuando dejé el taller tenía que sacarlo y como era tan grande no sabía donde meterlo y además estaba pintándolo, osea que no estaba terminado. -Como me suele ocurrir con las algunas obras que empiezo y luego no se que me ocurre que se quedan en el tiempo sin terminar.

Bueno pues para sacarlo lo desclavé del bastidor y lo enrolle a modo de pergamino y me lo llevé a mi casa y duerme a todo lo largo enrollado arriba del ropero que coge de testero a testero.

Y hoy lo he desenrollado y le he hecho alguna que otras fotografía para enseñároslo. Ojo no está terminado y esta muy deteriorado y no sé cuando y como puedo terminarlo debido a su gran tamaño, pues no lo puedo terminar en mi casa de aquí de Triana. Ahí van las imágenes


No he podido mostraros los pies porque no llegaban los brazos de mi hermana y mi padre que lo estaban sujetando mientras yo hacía la fotografía


Es un cuadro enorme que me inspira mucho el ponerme a pintar pero no puedo, al menos aquí en mi casa.

Aquí en esta toma se ve algo deformada la imagen pero si se fijáis a la derecha de la fotografía se aprecia el brazo alzado y parte del cuerpo de mi hermana sujetando la tela, en el otro extremo está mi padre, la pongo para que sirva a modo orientación para que se vea la envergadura del cuadro


Es una gran obra...que pena que haya dejado abandonada. está muy deteriorada el lienzo por alguna parte que otra está roto, aunque eso tiene fácil arreglo paro lo malo es su tamaño, necesitaría todo el comedor de mi casa para arreglar limpiar y hacer un bastidor a modo de esos que se usan en las Sinagogas para enrollar las escrituras. Eso es lo que tengo pensado.

Bueno: -he aquí que he terminado con esta entrada, espero más adelante hacer una entrada de blog con el proceso de restauración y recuperación de esta gran obra , de este gigantesco cuadro que de un modo u otro pienso terminarlo ya que lo más difícil, como siempre digo en mis obras, ya está hacho.
Gracias y espero no haberos aburrido con mis pequeñas historias de mis cuadros de hace ya más de 30 años.  

jueves, 29 de mayo de 2014

Mis cuadros de hace más de 30 años II

Hola esta es una nueva entrada de una pequeña exposición de mis pinturas, de las que me han quedado porque he perdido muchas o he regalado y no las tengo en mi poder para mostrárosla.
Empezare por este cuadro.


Este cuadro también es un trozo de un retal de lienzo que andaba suelto por entre los chisme del taller y lo enmarqué en un bastidor de listones de maderas que también se hallaban entre los retales de maderas del taller en el que yo restauraba muebles con mi padre. 
El marco osea la moldura también es viejas, o como se suele decir ahora con la modernidad: reciclada, pues fue que me encontré el marco tirado al lado de un contenedor y yo lo cogí lo corté y lo acoplé al cuadro. Que como se puede apreciar es el momento de la salida del Señor del Gran Poder. La pintura en sí no es que sea muy buena pues los trazos que daba en aquella época eran muy toscos y bruscos pero la idea de lo que quería representar y la luz que sale de las puertas del templo iluminado la fachada era lo que quería representar.

  
Quizás aquí se ve mejor, más natural, lo único que se ve mal es el reflejo del flash de la cámara, pero así es y está colocado en el lateral de la escalera de caracol que sube a la parte de superior de la casa.


En esta fotografía de la escalera se ve donde está colgado el cuadro, a la izquierda de la imagen.
Hay un cuadro el cual yo le tengo mucho cariño, porque lo pinté ya cuando yo tenía mi propio taller en la calle Alfonso XII, era muy pequeñito, pero tení mucho trabajo restaurando toda clase de muebles y enseres de artesanía, y es el siguiente. Además este si lo enmarque yo a conciencia: e aquí el cuadro :


El Cachorro de Triana saliendo por la Puerta de los Palos de la Catedral en el paso de Castillo Lastrucci. Por aquel entonces yo le hablama a una novia que yo tenía y una de esas veces que se hacían limpieza en las casa, en la casa de mi novia por aquel entonces que justo vivía detrás de la pared donde yo tenía el taller, tiraron un mueble-cama ya que yo le regalé una cama que era una maravilla de palillería torneada que me la encontré tirada y que en seguida me di cuenta del valor artístico de la cama. Bueno más bien se la encontró mi padre, y yo la desalme palo por palo y la volví ensamblar una ves saneada y restaurada dejándola nueva.
Pues al tirar aquel viejo mueble cama, yo como siempre aprovechando todo lo que se me ocurría para pintar, cogí el panel que servía para tapar al mueble por detrás, osea la trasera del mueble. Entonces no sé como pero me encontré una postal pequeña de esas antiguas del escudo de oro del Cachorro de Triana y no se me ocurrió otra cosa en ese momento que pintarla sobre aquel gran panel de la trasera del mueble-cama que , claro, ya estaba barnizado por una cara y era perfecto para pintar ya que no me absorbia tanto la madera la pintura pues el mismo barniz servía de imprimación para soportas la gran cantidad de brochazos que tuve que dar para conseguir lo que se encuentra reflejado en la fotografía basándome sólo en aquella pequeña postal que cabía en la palma de mi mano y la lleve a un retal de panel de casi un metro por un metro. Me dejé las pestañas intentando ver los detalles de la postal. 
Pero e ahí el resultado un gran cuadro, el más grande que había pintado y además para mí, en aquel momento, era lo mejor que había hecho.

De hecho cuando lo termine lo enmarqué como ya dije y se colocó y estás colocado en la cabecera de la cama del dormitorio de mis padres, en mi casa, la de aquí en Triana. 


El cuadro son brochazo más o menos tosco a modo de muchos retoques debido a que llené antes el ojo que la mano, es decir, que me gustó tanto la postal que lo que quería era pintarla pero no me había dado cuenta de la envergadura y de la magnitud de lo que me supuso reflejar lo que veía tan fácil con mis ojos pero luego con la mano no era capaz de sacarle todo el partido que yo tenía en mi mente, o que yo veía en la postal tan claro. 
Había que seguir educando la mano para llegar a reflejar con más precisión y eficacia lo que uno ve con los ojos       


Este nuevo cuadro que se sabe que el la Virgen de Las Angustias de la Hermandad de Los Gitanos. También tiene su historia.
De momento esta pintado sobre un fondo de cajón de una cómoda de esas de las antiguas y el fondo era de tablas, y además está pintado sobre otra pintura que yo pinté antes que a la Virgen, y que no me gustó y la pinté en lo alto, debido a esa pintura anterior que había debajo de la Virgen que no me gustaba; la tabla tomó cierta imprimación para soportar las pinceladas que ya empezaban a ser más perfectas y definidas. Se notaba que la mano se iba educando poco a poco. 
De ahí esas imperfecciones que se aprecian en el rostro de la Virgen, también influye la fotografía, porque uno ve el cuadro al natural y no se nota esa rugosidad que no son ni más ni menos que las vetas de la madera de pino 

   
En este cuadro ya se aprecia la evolución de las pinceladas y la precisión en la mezcla de los colores para sacar las distintas tonalidades del mismo. Una cosa; no está terminado empecé con él en el taller y después me entró trabajo y lo dejé abandonado, hasta que un día mi padre como de costumbre lo cogió y lo enmarcó así tal como está. Yo le dije -¡ pero si aún no está terminado !, -es los mismo, yo, ya lo he enmarcado. Y así se quedó.


Y ahora está colgado en el dormitorio en la cabecera de la cama con dos angelitos custodios a los lados.

Y ahora vamos a otro cuadro el cual yo le tengo mucho aprecio porque ese sí ya está pintado en lienzo preparado y enmarcado en un bastidor pero de fábrica, pues lo compré por aquel entonces en Casa Carreras, que era donde compraba todo lo relacionado con los dibujos y pinturas que estaba en la calle Amor de Dios.


El Cristo de Pasión. Este cuadro si le compré la caña osea la moldura del cuadro, lo llevé a enmarcar a la Casa del Cuadro allá en la calle Alfonso XII, me costó por aquél entonces 30.000 pesetas, una barbaridad. Pero para mí en aquel momento me pareció que se lo merecía. Este ya tiene cierta dimensiones considerables.



He puesto otra toma porque las fotografías no son muy buenas que digamos.


Este es el lugar que ocupa en la casa. Los muebles están tapados para protegerlos y por eso se ve un poco como desordenado, pero no.

-...Bueno pues espero que os haya entretenido esta otra historia de mis cuadros y nos os haya aburrido mucho mi mediocre relato.
Un saludo y continuaré con otra entrada. Hasta pronto.

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